El Archivo Histórico Municipal exhibe un privilegio de Enrique IV a la ciudad de Jaén eximiendo del pago de impuestos con el fin de fijar la población

El Archivo Histórico municipal expone al público durante este mes de julio una joya histórica documental: una carta otorgada por Enrique IV concedida a la ciudad de Jaén en Ávila en 1456 por la que se exime a los habitantes, sus huertas, alquerías y arrabales, del pago de ciertos impuestos. Un privilegio que tenía el objetivo de asentar la población en el territorio y frenar la despoblación.

En concreto se trata de la carta de confirmación de un privilegio concedido “asi a christianos como judios e moros que biven e moran e bivieren e moraren de aqui adelante para siempre jamas en la dicha çibdad de Jahen e en los dichos sus arravales e huertas e alquerias”, para quedar libres del pago de ciertos impuestos.

Los privilegios rodados y las cartas de confirmación de privilegios son los documentos más solemnes expedidos por la cancillería real, tanto por su calidad caligráfica, como por la artística. Destacan por el uso del pergamino como soporte de escritura, además de la profusión de decoración a base de letras capitales, diferentes tintas de color, orlas miniadas con motivos florales o vegetales y detalles animalísticos o fantásticos, además de la típica y muy cuidada letra gótica de privilegios o gótica textual.

El contexto histórico en el que nos situamos es al inicio del reinado de Enrique IV quien, previa intercesión del que fuera condestable de Castilla, D. Miguel Lucas, decide otorgar una merced en 1456 que exima a los vecinos de Jaén del pago de una serie de impuestos llamados pedidos, moneda, moneda forera, empréstitos y servicios. Estos impuestos, de origen medieval, estaban destinados en su mayoría a solucionar por parte de los súbditos los problemas económicos y urgencias de la hacienda del reino.

El fin con el que se otorga dicha exención impositiva es el de mantener a los habitantes de la ciudad de parte del monarca y asentar a la población en un lugar de frontera en constante peligro de saqueo por parte de las tropas nazaríes de Granada, además de agradecer los servicios prestados por D. Miguel Lucas, como textualmente se indica:

“Por ende yo, acatando e considerando todo esto e a los muchos e buenos e leales e agradables e continuos seruiçios que Miguel Lucas, mi criado e falconero mayor e mi alcayde de la çibdat de Alcala la Real, me ha fecho e faze de cada dia, quiero que sepan por esta mi carta de preuilegio (…)”.

La decoración de la orla miniada de este documento es a base de motivos vegetales, insertando en el margen inferior izquierdo un elemento heráldico basado en un ángel con alas gules y azures que sostiene un escudo cuartelado, donde el primero y el cuarto van en plata con león rampante y el segundo y tercero en gules con banda dorada engolada con dragantes. Se trata del escudo de armas del condestable D. Miguel Lucas, persona que, como hemos comentado, suplicó y pidió al rey la concesión de este privilegio para los habitantes de Jaén “queriendo acrescentar la nobleza, onor e poblaçion de la dicha çibdat, e meiorar los estados e faziendas de los uezinos della”; y que Enrique IV tuvo a bien otorgar, en agradecimiento a sus múltiples servicios prestados.

Este documento estará expuesto en la Sala de Investigadores del Archivo (Edifico Moneo del antiguo Banco de España) hasta el día 31 de julio, de lunes a viernes en horario de 9.30 a 14.00.