El yacimiento de las Vacas del Retamoso, en Santa Elena, sufrió un acto vandálico
La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico ha restaurado con éxito las pinturas rupestres del Conjunto VII del yacimiento de las Vacas del Retamoso en el Parque Natural de Despeñaperros, que fueron objeto de un acto vandálico al final del pasado año, lo que generó un amplio rechazo social por el daño causado en estas manifestaciones artísticas.
La consejera, Patricia del Pozo, ha destacado “el excelente trabajo y la profesionalidad de los técnicos en esta restauración, en la que desde la Consejería hemos estado trabajando desde el momento en que conocimos esta agresión al patrimonio cultural”. Como primera medida, ha añadido,“se encargó un análisis del producto usado, de color rosáceo, así como el estudio de las posibles soluciones para proceder a su eliminación de forma segura, lo más pronto posible”.
Tras varias semanas de trabajo, las labores de restauración han finalizado con éxito, gracias a la confección de un producto específico en gel que se ha aplicado mediante imprimación de hisopos de algodón en varias fases de limpieza. Con esta técnica, la pintura vandálica va quedando adherida al algodón, lo que permite quesea removible sin afectar a las manifestaciones artísticas situadas debajo. Respecto a las capas más superficiales, se ha eliminado la pintura vandálica con ayuda del bisturí y una lupa binocular.
Desde la Consejería de Cultura, ha señalado Del Pozo, “nos comprometimos a actuar de inmediato y así lo hemos hecho, demostrando la firme a apuesta del Gobierno andaluz con el patrimonio, en este caso con el arte rupestre, y su conservación”, al tiempo que volvió a condenar este atentado contra el patrimonio artístico jienense.
Los trabajos de retirada de las pinturas vandálicas se han podido llevar a cabo, y así lo apunta el equipo técnico,después de realizar una analítica mediante fluorescencia de Rayos X con objeto de determinar la composición de un producto idóneo para su eliminación. Igualmente, antes de proceder a laaplicación de dicho producto ad hoc sobre las pinturas rupestres atacadas con pintura,se ha descartado su posible filtración realizando ensayos en otros soportes del entorno para así asegurar su conservación.
Las manifestaciones artísticas rupestres que han recuperado ya su estado original se conocen popularmente como ‘las sacerdotisas’. Se trata dedos figuras antropomorfas bitriangulares con tocado, dispuestas junto a un ciervo en actitud de berrea. Sus pigmentos son rojizos, con el hierro como uno de sus principales componentes.
‘Las sacerdotisas’ forman parte de las manifestaciones artísticas de estilo esquemático y levantino que alberga el Conjunto Rupestre «Vacas del Retamoso-Los Órganos», con 400 figuras diseminadas en 14 puntos diferentes.La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico encargóen 2020 a un grupo de expertosdiversos estudios y proyectos para caracterizar y conservar este patrimonio cultural. Habían culminado el pasado año antes de producirse el ataque.
El paso de Despeñaperros es un territorio jalonado por la presencia de numerosos conjuntos de arte rupestre distribuidos a lo largo de la línea de fractura de la sierra, formando cinco núcleos que se localizan en las cabeceras de los ríos Guadalmena, Guadalén, Guarrizas, Despeñaperros y Rumblar. En ellos se han catalogado unos 50 yacimientos, con unos 115 abrigos o conjuntos, siendo el yacimiento de Vacas del Retamoso-Los Órganos el más destacado por la abundancia y variedad de sus representaciones.