Artículo de Teresa López, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR)
Fademur representa al conjunto de mujeres que quieren seguir en los pueblos. En las zonas rurales los desequilibrios de género no se acortan, sino que se agrandan. A las desigualdades clásicas hay que añadir la sobrecarga de responsabilidades que las mujeres tienen en el medio rural, junto con la ausencia de servicios y ayudas.
La Ley de Cotitularidad de las explotaciones agrarias fue un paso muy importante, pero la realidad nos dice que la igualdad legal no se traduce en igualdad real. Son muy pocas las mujeres que han logrado esa cotitularidad, en parte por su tenacidad. Pero la verdad es que resulta complicado promover un cambio de mentalidad hacia la igualdad en las zonas más rurales.
En cuando al emprendimiento, se da la circunstancia de que quienes más emprenden en el mundo rural son precisamente las mujeres. Está claro que las mujeres quieren seguir viviendo en sus entornos, pero lo quieren hacer con independencia y autonomía.
Creo, finalmente, que el futuro en el mundo rural y la lucha contra la despoblación depende en gran medida de las mujeres.
Desde 1975, España ha aumentado su población en un 36%. Sin embargo, grandes extensiones de su territorio se están quedando vacías. El fenómeno del despoblamiento rural, del que lamentablemente España es referente europeo, debe ser una cuestión muy preocupantes para toda la sociedad, incluida la urbana.
Desde mi experiencia al frente de Fademur, he comprobado cómo las mujeres son las primeras en marcharse ante la falta de respuesta a sus necesidades en el medio rural. Vemos lo que está pasando por ignorarlas, la masculinización, el envejecimiento e incluso la desaparición de los pueblos.
Y no es una percepción, pues hay un dato preocupante que dice de que las cinco personas que pierden los pueblos cada hora, el 63% son mujeres. No nos podemos imaginar un mundo rural con futuro en el que las mujeres no estén presentes, sería una sociedad artificial e inviable. Por eso decimos que el futuro del mundo rural será con mujeres o no será.
Es crucial garantizar a las mujeres dos cosas. En primer lugar, la autonomía económica de las mujeres en los pueblos. Por eso, la federación centra gran parte de sus esfuerzos en impulsar el emprendimiento entre las mujeres rurales a través de programa como Ruraltivity, la lanzadera de emprendimiento rural que cuenta con el apoyo del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
En segundo lugar, garantizar el acceso a servicios en el medio rural. En este sentido, existe la necesidad de asegurar aquellos servicios relacionados con la población mayor e infantil ya que la responsabilidad sobre estas personas recae normalmente en las mujeres.