El descubrimiento fue fortuito por miembros del Grupo de Espeleología de Villacarrillo en una cavidad del parque natural
Miembros del Grupo de Espeleología de Villacarrillo (G.E.V.) han descubierto restos arqueológicos en una cavidad ubicada en pleno Parque Natural y Reserva de la Biosfera de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, en concreto en el término municipal de Segura de la Sierra. Según indican los espeleólogos del G.E.V., para preservar y conservar este enclave han decidido no exponer ni ubicar exactamente el lugar, aunque ya han informado debidamente a las Delegaciones Territoriales de las Consejerías de Cultura y de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, así como al director-conservador de dicho espacio natural protegido, y a arqueólogos de la Universidad de Jaén.
El descubrimiento de la cavidad fue fortuito por parte del hermano de uno de los miembros del G.E.V., Paco Cuadros, que inmediatamente se lo comentó a su hermano y se sondeó la viabilidad de exploración de la cavidad. Días más tarde, miembros del colectivo villacarrillense se desplazan hasta la zona para hacer la exploración espeleológica completa.
“Tras una entrada reptando, se abre la cavidad en forma descendente y con pasos delicados entre bloques y el colapso del suelo. La primera parte de la cavidad es fácil, pero a partir de algunos pasos estrechos, ya se complica. Es en esa primera parte donde hemos encontrado la cavidad removida e incluso con destrozos de algunas formaciones”, ha explicado Toni Pérez, presidente del G.E.V.
Durante esta exploración han localizado muchos restos de cerámica, restos óseos, restos de hogueras e incluso lo que creen que podrían ser pinturas rupestres. Según Toni Pérez, “tras la realización de la exploración total de la cavidad, levantamos el croquis topográfico e hicimos algunas fotografías para documentar lo que nos encontramos. Según nuestros compromisos y nuestros objetivos de conservación del patrimonio subterráneo, hemos dado parte a las administraciones competentes”.
Tras la exploración de esta cavidad, las medidas de la misma han arrojado 40 metros de desnivel y 200 metros de desarrollo total. Ya en años anteriores, miembros del G.E.V. descubrían también en la Sierra de Segura varias cavidades con restos arqueológicos en los términos municipales de Siles, Hornos, Segura de la Sierra y Orcera, siguiendo las mismas pautas de información, divulgación y conservación. Algunos de estos resultados han dado con dataciones del Neolítico, enterramientos y pinturas rupestres.
“La práctica de la espeleología, ya sea federada o no, deportiva o científica, en un espacio natural protegido, debe hacerse con las autorizaciones y permisos establecidos. Además, si alguien se encuentra con restos arqueológicos, debe dar aviso a las administraciones. Aquí nos hemos encontrado con suelo removido, cerámica superpuesta en montones, rotura de formaciones, etc. Esto hace que no se contextualice y no se conserven los restos arqueológicos en condiciones”, ha añadido Toni Pérez.
Para los miembros del G.E.V. es muy importante que las administraciones tomen partido en la investigación por parte de especialistas en estos temas, para datar y conservar el patrimonio arqueológico de la Sierra de Segura. Su objetivo fundamental es poner en valor todos estos hallazgos siempre en la protección de estas cavidades, y evitando que haya expolios, roturas o visitas incontroladas, una labor que llevan realizando desde hace 45 años en el territorio jiennense.