Los escritores Sergio del Molino y Manuel Moyano hablan del poder evocador de la literatura y de su potencial para atraer visitantes a la España más despoblada

FOTOGRAFÍA DE PORTADA: Los escritores Andrés Ortiz Tafur y Sergio del Molino, durante el Encuentro Literario de Repoblación de Santiago de la Espada.

La literatura cuenta con un enorme poder de atracción de visitantes hacia un determinado territorio. Es la conclusión principal extraída del I Encuentro Literario sobre Repoblación celebrado en Santiago de la Espada y organizado por el escritor y gestor cultural del municipio Andrés Ortiz Tafur.

“La literatura es un camino para rebelarte contra el camino que te han ido marcando”, señaló durante su intervención Sergio del Molino, autor del libro “La España Vacía” (Alfagura), convertido en todo un referente para adentrarse en la literatura de los territorios rurales y la España de interior.

En el transcurso de un diálogo mantenido con Ortiz Tafur, el escritor aragonés señaló que los temas literarios “no surjen, sino que se van imponiendo a partir de vivencias personales”. Sobre la publicación “La España Vacía” del Molino lo definió como “un compendio de obsesiones que desembocan en una certeza” y reconoció que el libro “ha provocado un cambio en la manera de pensar en el tema demográfico gracias a la literatura”. A su juicio, la población que forma parte “identidad toponímica” agrupa a “personas que se sienten de un mismo olvido, de un mismo resentimiento”.

Para Sergio del Molino, el desequilibrio demográfico que sufre el país hay que entenderlo como un “rasgo de anormalidad”. Pero se congratuló de que el debate sobre la despoblación y el reto demográfico haya entrado en la agenda pública y mediática del país, y también en el mundo del cine, como lo demuestran las últimas y premiadas películas de los Premios Goya. “Ahora existe una mayor sensibilidad hacia los problemas de la España Vacía”, indicó Del Molino, quien, no obstante, dejó claro que “el campo y la ciudad están condenados a entenderse”.

Sergio del Molino analizó también la irrupción en la política nacional de las formaciones vinculadas a la Plataforma de la España Vaciada, como Teruel Existe, Soria Ya y ahora también Jaén Merece Más. “Fue un error estratégico dar el paso como partidos políticos, como plataformas ciudadanas habrían tenido más influencia”, subrayó el autor de “La España Vacía”, colaborador de Onda Cerro y de EL PAIS.

El escritor Manuel Moyano, durante su intervención en el Encuentro Literario sobre Repoblación de Santiago de la Espada.

Con anterioridad, también intervino el escritor Manuel Moyano (Córdoba, 1963)  con una charla titulada: «La influencia de la literatura en la visión del mundo rural. El caso de la Oróspeda». Moyano, que destacó “la importancia del papel evocador de la literatura sobre un determinado territorio”, hizo un repaso por toda la literatura vinculada a la España rural, desde la generación del 98, con Azorín, Cela o Delibes a los autores contemporáneos como Julio Llamazares, Sergio del Molino o el propio Andrés Ortiz Tafur.

Manuel Moyano  vivió su infancia y adolescencia en Barcelona y reside en Molina de Segura (Murcia). Como novelista ha publicado El imperio de Yegorov (Finalista del premio Herralde y Premio Celsius de la Semana Negra de Gijón). La coartada del diablo (Premio Tristana). La agenda negra, El abismo verde y La hipótesis de Saint-Germain (Premio Carolina Coronado). Muestras de su narrativa breve son El amigo de Kafka (Premio Tigre Juan), El oro celeste, El experimento Wolberg y los microrrelatos de Teatro de ceniza. DE su obre de no ficción destacan Dietario mágico, El lobo de Periago o Mamíferos que escriben. Es autor de tres libros de viajes: Travesía americana, Cuadernos de tierra y el reciente La frontera interior, periplo por Sierra Morena, que obtuvo el premio Eurostars de Narrativa de Viajes.

La periodista Carmen Díaz-Beyá fue la encargada de abrir el Encuentro Literario de Repoblación.

El Encuentro Literario sobre Repoblación se abrió con la intervención de la periodista Carmen Díaz-Beyá, del portal Ruralismos, que habló del relato periodístico sobre el medio rural a partir del informe que realizó para la Cátedra sobre Despoblación y Creatividad de la Universidad de Zaragoza, y del que reproducimos a continuación un resumen de sus conclusiones:

«La primera conclusión a destacar, es que la despoblación se ha erigido como un concepto que va más allá de las poblaciones que la padecen. Hemos observado que, al hablar de despoblación, se habla también del medio rural, de los pueblos que están más alejados de las urbes o de las cabeceras de comarca. En general de lo que se habla, es de la problemática común que hay en el medio rural. Y esa problemática común, vista sobre el terreno, es la deficiencia en todo tipo de servicios, empezando por los más básicos.

Por lo demás, cada pueblo es diferente y por ello, hasta la adjetivación dada a esa supuesta territorialidad común en problemas y alejada en distancia en muchas ocasiones, lo de España vaciada, es un adjetivo que no genera consenso. Para empezar, porque es una manera de simplificar todas las aristas de la cuestión cuando aún no está ni siquiera bien definida por los mismos medios de comunicación.

Hemos visto que la despoblación no ha emergido de la nada y que, aunque por goteo, un poco antes de la Revuelta, la literatura en particular, y los medios de comunicación en general, ya fueron haciendo sus apuestas en torno a la temática. Aún hay que desmitificar clichés e imaginarios, como el hecho de que no existan políticas para mejorar la situación –si existen, lo que hay que hacer es aplicarlas– o Incluir temáticas más allá de la agricultura, la ganadería y la despoblación. También hay que hablar en estos entornos del cambio climático: el medio rural y su escasez, por ejemplo, de transportes públicos colectivos, obliga a hacer uso del coche particular y esto no es una buena práctica ambiental. No siempre lo rural es ambientalmente más sostenible, pero sí, en muchos casos, la posibilidad de que lo sea, no está en las manos de sus gestores más cercanos, los cuales suelen sentir impotencia ante ésta y otras cuestiones, por la lejanía de los lugares donde se toman las decisiones que son importantes para ellos.

Sí me gustaría finalizar destacando la labor del periodismo local y más en concreto, del periodista local o rural, que aquí ejerce una función básica y fundamental. Una tarea que transciende del hecho de dar una información veraz, objetiva y contrastada, porque es de este ámbito del que se espera que venga la mayor parte de iniciativas para la reconstrucción de un relato obsoleto, decorado con demasiados lugares comunes».

En el I Encuentro Literario sobre Repoblación la intervención más emotiva fue la del artista segureño Julio Ortega, que emocionó al público asistente con la lectura del “Romance de la loba parda” e hizo una llamada a todos los agentes sociales de la Sierra de Segura y de Santiago-Pontones para “remar todos en la misma dirección”.

El artista segureño Julio Ortega recitó el «Romance de la loba parda» en el Encuentro de Santiago de la Espada.