Unas jornadas conmemoran el centenario de la declaración de la Cueva de la Graja de Jimena como Monumento Histórico Nacional
El presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, ha participado, junto al alcalde de Jimena, Francisco Ruiz, en la apertura de las jornadas conmemorativas del centenario de la declaración de la Cueva de la Graja de Jimena como monumento histórico nacional, un acto en el que ha resaltado la oportunidad que supone este aniversario “para reivindicar la relevancia de este enclave celebrando un encuentro como este, en el que se va a profundizar en la singularidad de este yacimiento arqueológico, que sitúa a Sierra Mágina y a la provincia de Jaén como referentes del arte rupestre”.
En este foro –donde se dan a conocer distintos estudios e investigaciones realizadas sobre esta cueva que alberga pinturas rupestres de unos 5.000 años de antigüedad, ya que están datadas entre el Neolítico y la Edad de Bronce–, Reyes ha incidido en la “necesidad de dar a conocer aún más y promocionar las pinturas rupestres de este lugar, que hace tiempo que despiertan gran interés entre expertos y también visitantes en general”.
En esta línea, ha señalado que “nuestra tierra es conocida por su gran riqueza cultural, patrimonial, natural y artística”, ya que cuenta con “un legado inmenso de civilizaciones y pueblos que se han asentado en nuestro territorio dejando una profunda huella”. Al respecto, Francisco Reyes ha recordado los vestigios del pueblo ibero, los castillos y fortalezas que “nos convierten en referentes en el sur de Europa” o el patrimonio renacentista, con Úbeda y Baeza, Ciudades Patrimonio de la Humanidad, a la cabeza”. Junto a estos grandes atractivos se sitúa también “el arte rupestre, con pinturas declaradas Patrimonio de la Humanidad en la zona de Aldeaquemada; o estas de la Cueva de la Graja, sin olvidar otros hallazgos prehistóricos relevantes como los de Bedmar”.
Para el presidente de la Diputación, esta es una muestra de “la importancia que tiene la historia para cualquier pueblo, no solo por su sentido didáctico y pedagógico, sino por las oportunidades de creación de riqueza que surgen en torno al aprovechamiento del patrimonio histórico”. En este sentido, Reyes ha concluido subrayando que “igual que conocer la historia es fundamental para no repetir los errores cometidos en otras épocas, es muy necesario sacarle partido a todo lo que nos legaron nuestros antecesores, porque sobre ese legado, se puede construir futuro”.