ARA plantea la unión de las pequeñas comunidades energéticas locales para hacer un frente común en defensa de los intereses de los territorios rurales

El presidente de la Asociación de Desarrollo Rural de Andalucía (ARA), David J. García Ostos ha señalado el papel clave de los Grupos de Desarrollo Rural (GDR) en la puesta en marcha de las Comunidades Energéticas Rurales. “Los Grupos cuentan con una dilatada experiencia y trayectoria en liderar procesos de desarrollo basados en la colaboración público-privada”. En su opinión, los Grupos LEADER deben abanderar la transición energética en los territorios rurales tal y como hicieron, en su día, con el desarrollo rural. Además, ha añadido que estas entidades territoriales dinamizan y dan confianza a la población local en un contexto de gran desconfianza energética. “Nadie como ellos conoce las necesidades y potencialidades de cada territorio y actúa de manera colectiva contando con la población local, empresas, equipos municipales y cercanía con la administración”, ha recalcado.

El presidente de ARA, que ha inaugurado la jornada “Comunidades Energéticas en zonas rurales” en Monachil (Granada), ha propuesto la unión de las pequeñas comunidades energéticas locales en un frente común que represente a los territorios rurales y lleva su voz a aquellos foros donde se decide sobre la energía en lo rural. Por último, García Ostos ha defendido que “la participación ciudadana es fundamental: necesitamos un uso más sostenible de los recursos, más participativo y más basado en lo que quiere la ciudadanía”. En la presentación de este encuentro también han estado Manuel Martín, alcalde de Beas de Granada y presidente del Grupo de Desarrollo Rural Alfanevada y el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Monachil, Blas Gómez.

La jornada, organizada por ARA, y con la financiación de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, ha reunido a un amplio número de Grupos de Desarrollo Rural que han conocido experiencias de Comunidades Energéticas Locales en Andalucía y Cataluña. Muchos de ellos vienen trabajando con LEADER hacia una transición energética de las principales actividades económicas de sus territorios.

Albert Puigvert, gerente de la Asociación de Iniciativas Rurales (ARCA), ha explicado cómo LEADER ha venido trabajando, desde 2010, las fuentes de energías renovables en el medio rural. Destacó el proyecto de cooperación LEADER ENFOCC con la participación del Grupo de Desarrollo Rural Sierra de Cazorla en Andalucía. Actualmente, ARCA apoya la formación de gestores energéticos para Comunidades Energéticas; potenciando las mesas de transición energética en el territorio y acompañando a las Comunidades Energéticas Locales, entre otras.

A continuación, el presidente del GDR Gran Vega de Sevilla, Juan Carlos Expósito presentó la Comunidad Energética Toda Sevilla en la que participan Grupos de Desarrollo Rural de la provincia. Se trata de un proyecto liderado por la asociación comarcal Gran Vega de Sevilla para impulsar «la innovación social y la participación ciudadana en renovables, eficiencia energética o movilidad eléctrica». Expósito defendió el papel de los Grupos de Desarrollo Rural en las Comunidades Energéticas Rurales. “Los Grupos dan confianza a la población y además pueden asesorar a los Ayuntamientos y empresas del territorio al igual que vienen haciendo en muchos otros temas”.


José Rafael Guijarro, gerente del GDR Guadajoz y Campiña Este de Córdoba (ADEGUA) habló del proyecto de cooperación LICLE: Liderando las Comunidades Energéticas Locales en el que participa junto a los GDR Aljarafe-Doñana, Medio Guadalquivir y Valle del Guadalhorce. El conocimiento adquirido con LEADER le ha llevado a la Comunidad Energética de Guadajoz. Guijarro defendió que las Comunidades Energéticas Rurales son una herramienta para empoderar a la ciudadanía de una forma “equitativa, democrática e inclusiva”, sin dejar a nadie atrás. Y es que la pobreza energética se agudiza entre las mujeres, lamentó el gerente de ADEGUA quien habló de solidaridad hacia las personas más vulnerables. A renglón seguido,reflexionó sobre la importancia de llevar la transición energética al sector agrícola concluyendo que una de las máximas del trabajo de los Grupos de Desarrollo Rural es “piensa global y actúa local”, es decir, qué podemos hacer desde nuestros pueblos en retos tan importantes como el cambio climático.

Por último, el coordinador técnico de la Comunidad Energética del Río Monachil, José Miguel Granados presentó dicha iniciativa, una de las primeras de Andalucía.Parte de un proceso previo de asesoramiento técnico y social de una cooperativa de servicios energéticos del que se benefician tanto el ayuntamiento como las familias poniendo el acento en la eficiencia y el consumo consciente de energía. Ha sido capaz de construir una alianza público-privada-ciudadana que logra involucrar a las propias vecinas contra la pobreza energética mediante la producción y consumo de energía de proximidad. Finalmente, los participantes intercambiaron propuestas y acciones sobre energía sostenible destacando el potencial de los territorios rurales.