Dos ingenieros utilizan IA y drones en sus aplicaciones para luchar contra el cambio climático y digitalizar entornos rurales

(Reportaje publicado en EL PAÍS el 25 de agosto)

Jesús Múñoz, un ingeniero industrial, y Antonio Ceballos, responsable de I+D+i, se conocieron hace más de dos décadas en La Carolina (Jaén). Los dos coincidieron en distintos proyectos vinculados al diseño industrial y la informática, y a ambos les unía también su pasión por la naturaleza y el medio ambiente que, con el paso del tiempo, han convertido en su principal y exitoso argumento laboral. En 2021 crearon Somnum Technologies  SL, una empresa que utiliza la  Inteligencia Artificial para luchar contra la sequía o prevenir incendios forestales.

Somnum Technologies (que significa ‘sueño tecnológico’) es el resultado de la fusión de tecnología y naturaleza de estos emprendedores que han ido aumentando sus beneficios año tras año y que facturaron más de 200.000 euros el último ejercicio. Proyectos como el árbol solar multimedia o una consola de pilotaje y control remoto para drones y vehículos terrestres  se han convertido ya en  referentes en la lucha contra el cambio climático. También ofrecen modelos de tecnología avanzada para el nuevo paradigma de las ciudades digitales y Smart City.

“La digitalización y automatización de procesos está llegando a todos los ámbitos de nuestra sociedad, y nosotros desde aquí aportamos soluciones de alta calidad, sencillas, estables, con alta tecnología y con un equilibrio entre calidad y precio”, explica Jesús Múñoz, uno de los seis socios (y ocho trabajadores en total) con los que cuenta Somnum Technologies, galardonada recientemente con el Premio Emprende Innova de la Diputación de Jaén.

La vocación emprendedora de estos ingenieros les ha llevado también a ser reconocidos por ENISA (la Empresa Nacional de Innovación) como startup o empresa innovadora, biotecnológica, energética, industrial y que ha desarrollado tecnología propia.

Su cartera de servicios abarca sistemas industriales llave en mano y modelos de tecnología avanzada para el nuevo paradigma de las ciudades digitales, smart y green city, seguridad, UAVS y cambio climático. Como el árbol solar fotovoltaico que acaban de instalar en Conil de la Frontera (Cádiz), una instalación que representa, sin ningún impacto visual, las formas orgánicas, pero estructurales, de una encina, árbol típico del bosque mediterráneo y dehesa.  Con él, no sólo se consigue la generación de energía, sino que también es un símbolo de la reducción de la huella de carbono y una simbiosis entre mobiliario industrial, urbano y diseño natural. Este sistema implementa hardware y software embarcado para su control remoto y gestión de datos de la producción solar y, en el caso de Conil de La Frontera, adaptado a velocidades de viento de hasta 150 kilómetros/hora.

También tienen registrada la patente de reforestación conocida como Árbol de lluvia, que aporta soluciones para obtener en campo un óptimo desarrollo vital de cada cultivo  y una exitosa reforestación en fincas. “Es un dispositivo que aumenta significativamente la supervivencia de las plantas que tienen mayor crecimiento y vigor, mantiene la humedad del suelo y protege a la plántula de la herbivoría”, explica Antonio Ceballos sobre esta patente que fue avalada por el Departamento de Biología Animal, Biología Vegetal y Ecología de la Facultad de Ciencias Experimentales de la Universidad de Jaén.

La reforestación es una de las principales áreas de negocios de Somnum Technologies, que utiliza drones y aeronaves no tripuladas en muchos de sus proyectos. “Los drones no solo contribuyen a paliar el cambio climático, sino que favorecen el crecimiento y la perdurabilidad del entorno ambiental”, indica Ceballos.  Gracias a las imágenes aéreas captadas por drones es posible identificar las ubicaciones perfectas para la plantación de árboles, tomar infinidad de datos para analizar el estado de plantas y animales o hacer el seguimiento de animales en peligro de extinción o la lucha contra especies invasoras como la avispa asiática.

La empresa también ofrece un sistema automatizado de detección temprana de incendios y monitorización mediante sensores en matriz inteligente con revisión y reconocimiento rápido mediante apoyo de drones con cámaras térmicas de alta resolución.

La ubicación de esta empresa en un entorno rural (en las estribaciones de Despeñaperros y Sierra Morena) la convierte también en un perfecto aliado para luchar contra la despoblación. Lo hace a través del proyecto de última milla en zonas rurales (a través de UAVs y drones) que lleva la tecnología a zonas con baja densidad demográfica.

La ganadería extensiva también se puede beneficiar de estas aplicaciones a través del sistema de comunicación para los pastores. Un sistema que permite aligerar la carga de trabajo y el desplazamiento de los pastores, reduciendo costes y haciendo mucho más cómodo y atractivo su trabajo.